jueves, 17 de enero de 2008

... como la vida misma

Quiero hablar de cómo las personas te pueden llegar a despreciar, a negar su amistad y su ayuda, sólo por el hecho de ser homosexual. Aunque debo decir que, por suerte, he contado con algunos amigos de verdad.

De niño, nunca me interesaron ciertas cosas de hombres… La verdad es que odiaba el fútbol y siempre tuve más amigas que amigos. Crecer en un ambiente abierto me hizo más llevadero todo lo que me estaba sucediendo.

Ahora tengo 21 años y me acepto tal y como soy. Recuerdo, que en mi adolescencia me sentía solo, ya que no tenía referencias y sólo podía apoyarme en lo que veía en el cine y en lo que leía. Para superar todo esto, decidí hacerme un juramento: no mentiría más sobre mi homosexualidad. ¡Decidí no disimular y no cambiar! Gracias a eso he podido seguir hacia delante y ser yo.

De todos modos, quiero que sepan que cuesta mucho que algunos compañeros heterosexuales acepten que uno es gay. Las cosas, afortunadamente, han cambiado mucho y la gente ha dejado de pensar que ser gay es contagioso o que es una enfermedad. Creo que la gente dice muchas bobadas sobre el colectivo homosexual, por desconocimiento o miedo. En realidad, tendría que haber más información sobre gays y lesbianas. También sobre los transexuales y los travestís. Si pensamos un poco, nos daremos cuenta, que todos somos diferentes. Por ese motivo, las personas podrían dejar de hacer comparaciones, ya que cada uno de nosotros tiene una condición sexual diferente.

Yo no hago de mujer, ya que adoro ser hombre y amar a otro hombre. ¡Soy un enamorado del universo masculino! Cada uno debe ser como es y no darle demasiada importancia a lo que opinen los demás. Si tuviéramos que hacer caso a todo lo que dicen las personas sobre nosotros, caeríamos en una eterna depresión. Por lo tanto, la mejor arma para combatir estas cosas, es la indiferencia.

Mi consejo es que intentéis ser felices. Pensar que, cualquier preocupación que os venga por vuestra inclinación sexual, es mejor s consultarla con expertos sobre el tema: psicólogos, sexólogos y asociaciones de gays o lesbianas.

4 comentarios:

Anónimo dijo...

La vida es así y quien no la entienda es porque no tiene herramientas suficientes para vivirla. Me alegra saber que todavía hay gente que está dispuesta a vivirla, cueste lo que cueste.
Ve con la cabeza bien alta y piensa que la condición sexual de cada uno, no le ha de importar a nadie más, que no sea el que la va a disfrutar.
Un acto de valentía por tu parte, que tal vez muchísimas personas no habrían hecho en su vida.
¡Sigue así!

Anónimo dijo...

Muy cierto. La única forma de vivir que merece la pena, es siendo consecuente con uno mismo; en cómo uno es y en como uno se siente, aunque cuesta llegar a eso.
Un abrazo y no tardes tanto en actualizar. ;)

Anónimo dijo...

Felicidades por ser como eres, por que quien no se valora a si mismo, no lo será nunca por los demás.

(me apunto también a lo de actualizar con más frecuencia, o sea, procurar ir más por el punt Òmnia ;-)

Anónimo dijo...

hOLA te mando un saludo! reamlente no se si ya habeis salido de la carcel o no!... pero he descubierto este blog y me parece interesante conocer su puntos de vista...

Mi blog esta lleno dde una historia de amor Homosexual bajo una sociedad netamente Heterosexual que obligo a uno de los protagonistas a cometer errores espero que puedas leer un poco de ello... Te mando un saludo